Cuando pensamos en renovar el salón, tendemos a mirar primero lo grande: sofá, mueble de TV, mesa de centro… pero los interioristas saben que el verdadero cambio sucede cuando vistes el espacio con telas: cortinas, alfombras, cojines y tapicerías.
Son las capas que arropan la estancia, suavizan la acústica y conectan colores y texturas.
Hoy vamos a revelaros cuatro secretos que usan los interioristas para darle un toque diferente y con encanto al salón, simplemente jugando con un elemento tan inocente como las telas.
En la práctica: con buenas ideas y una inversión muy pequeña, podemos darle un cambio importante a la decoración del salón.
¡Y aquí va un secreto extra!
Ya sabéis que nosotr@s pasamos muchas horas viendo revistas de decoración, siguiendo la actualidad… y en esta ocasión nos hemos topado con esta guía de Staymag sobre cómo elegir las alfombras y telas del salón, que nos ha encantado.
En ella comparten criterios muy sensatos para empezar con buen pie, y han sido la inspiración para ponernos con este artículo. ¡Hacen un gran trabajo!
Desde nuestra mirada alfombrera, queremos sumar lo que aplicamos en proyectos reales: cuatro trucos muy “de oficio” para que tu salón quede cohesionado, cómodo y con ese punto de personalidad que se nota al entrar.
«Como solemos decir en el equipo: no es solo elegir telas bonitas; es orquestar el conjunto para que todo suene bien.”
Mer, Alfombra-T
¡Hoy nos hemos excedido un poco con la introducción! Así que sin más dilación, ¡empecemos!
1. Piensa en capas, y no en piezas sueltas
Elegir cojines “que te gustan” o una cortina “que pega” funciona a veces… pero los resultados profesionales llegan cuando piensas por capas.
Nosotros tenemos mucho contacto con equipos de interiorismo, y la mecánica de trabajo que aplican muchos de ellos, y que más nos gusta, sería algo así:
- Base: por ejemplo, la alfombra define el plano horizontal y ordena el mobiliario. Es el “ancla” del salón
- Marco de luz: cortinas que controlan entrada de luz y privacidad (traslúcidas si quieres atmósferas ligeras; forradas si buscas confort térmico y visual)
- Cuerpo: tapicerías que aportan estructura y textura (grano, trama, bouclé, pana fina, etc.).
- Acento vivo: cojines, plaids y pufs que introducen ritmo, contraste o estación

💡 Truco de interiorista
Elige un hilo conductor para las cuatro capas. Puede ser una textura (fibra natural, efecto bouclé) o una idea cromática (arena + piedra + tinta). Si dudas, pregúntate: ¿qué quieres que cuente tu salón: calma, calidez, frescura, sofisticación? Esa respuesta guía todas las telas.
2. Elige la paleta de colores desde la alfombra
En una estancia como el salón, la mayor “masa” textil la pone la alfombra; por eso muchos interioristas arrancan por ahí.
Desde su dibujo, su tono y su textura es facilísimo construir el resto.
- Paleta 60/30/10: 60% color dominante (suele ser neutro cálido o frío), 30% secundario (maderas, tapicerías) y 10% acentos (cojines, mantas)
- Temperatura y equilibrio: si el suelo y muebles son cálidos (roble, nogal), una alfombra neutra fresca (grises suaves, piedra) equilibra; si el espacio es frío (pavimentos grises, metal), una alfombra cálida (beige tostado, terracotas apagadas) abraza el ambiente
- Muestras en contexto: coloca las telas sobre la alfombra en la propia estancia, a distintas horas del día. La luz real manda más que la tienda

💡 Truco de interiorista
Repite un mismo tono en distintas texturas. Por ejemplo, un arena en alfombra de lana, cortina de lino y cojines en pana fina. Mismo color, tres lecturas: profundidad garantizada sin estridencias.
3. No te olvides de la calidad
Los entusiastas de la decoración nos dejamos llevar siempre por la estética de las piezas. Pero hoy en día sabemos que no todo lo que se vende es de calidad.
Por eso, no está de más recordar que nos fijemos en que toda pieza que incorporemos sean de una calidad
«La belleza dura cuando la técnica acompaña. Pero de qué sirve si una alfombra pierde tonos en su color a los meses, un cojín se llena de «bolas» o las cortinas no soportan la luz solar.»
Jesús – Alfombra-T
En tapicerías, cortinas y alfombras nos fijamos siempre en cosas como la resistencia y uso: sofás y butacas necesitan tejidos con buena resistencia al roce y costuras firmes.
Por ejemplo, en una casa con peques o mascotas, preferimos tramas cerradas y acabados antimanchas.
También es muy importante valorar el mantenimiento: cortinas de lino-lino son preciosas, pero si no quieres plancha, busca mezclas con viscosa o poliéster de buena caída.
En alfombras, la lana regula temperatura y es fácil de mantener; las fibras planas (yute, kilim, poliéster PET reciclado) son ideales para tránsito y verano; y los materiales indoor–outdoor aguantan trote y terrazas cubiertas.
Por último, otra variable a tener muy en cuenta es el confort y la luz: cortinas forradas mejoran oscurecimiento y termoacústica, mientras que una alfombra densa reduce el eco y “apaga” el ruido del salón.

💡 Truco de interiorista
Piensa en el pack confort: alfombra + cortina forrada fina + tapicería con textura. Esa triada sube la calidad percibida sin cambiar ni un mueble.
4. Ajusta las telas a cómo vives
La receta universal no existe. El salón ideal es el que se usa sin miedo.
Lánzate con tus ideas de decoración y no pongas límites a tu creatividad y fantasía. O sí… también debes de tener en cuenta algunos factores como estos:
- Vida de familia: aplica tonos medios a tus telas que disimulan el desgaste, utiliza fundas desenfundables, fibras planas o alfombras lavables; los cojines con cremalleras para rotar y lavar también vienen genial
- Espacio representativo: terciopelos, mezclas con seda o tencel y cortinas con caída generosa. Controla el brillo: en salones con TV, nosotros en general preferimos mates en cortinas y tapicerías para evitar reflejos
- Poco tiempo / mucho trote: telas técnicas antimanchas y alfombras indoor–outdoor dentro de casa (invisibles al ojo, pero muy sufridas)
- Orientación solar: al sur, tejidos que filtren y protejan; al norte, telas más ligeras para ganar luz

💡 Truco de interiorista
Busca contrastes táctiles dentro de una misma gama: suave (terciopelo) + rugoso (lino lavado) + mullido (lana peinada en la alfombra). El ojo se relaja y el salón “respira”.

Tendencias en decoración para el otoño-invierno 2025-2026
Nos ha venido de perlas releer la guía de Staymag como punto de partida. Compartimos esa filosofía de elegir con cabeza.
Además, en Alfombra-T añadimos siempre la mirada de suelo a techo: anclar con la alfombra, modular la luz con las cortinas, dar cuerpo con las tapicerías y “afinar” con los cojines. “Primero alfombrarse, luego vestir.”
En resumen: piensa por capas, arranca tu paleta desde la alfombra, cuida la calidad técnica y adapta cada tela a tu forma de vivir.
Si quieres, nos pasas unas fotos y el estilo que buscas y te proponemos una combinación concreta de alfombra, cortinas y tapicerías.
¿Cómo te gustaría que se sintiera tu salón cuando lo pises descalz@ por primera vez?