Tundido y apresto: cómo se hace una alfombra

Hoy queremos explicaros algunas cosas que seguro muchos no saben acerca de cómo se hace una alfombra. Vamos a exponer dos términos muy cotidianos para nosotros, como fabricantes de alfombras, pero desconocidos para la mayoría de la gente.

Cómo se hace una alfombra: procesos

1. El telar

El proceso de fabricación comienza con la parte más conocida por todos: el telar.

En nuestro caso nos valemos de un telar electrónico Axminster, una máquina de gran estabilidad y fiabilidad, que permite tejer la lana con grandes resultados.

2. El repasador/a

Alfombras extendidas lista para el proceso del repasaddor

El proceso de fabricación de una alfombra no acaba aqui, sino que este no ha hecho más que empezar.

Del telar, sacamos un «bulto», con varias alfombras. Pueden ir de 3 a 10 alfombras, dependiendo de la medida que tengan.

Ese «bulto», pasa primero por las manos de un/a repasador/a, que comprueba todas las alfombras y arregla a mano cualquier fallo que puedan tener.

Próximamente dedicaremos un artículo completo donde os explicaremos en qué consiste su trabajo detalladamente.

3. El apresto

El apresto consiste en darle a la parte inferior de las alfombras, es decir, al backing, una capa de latex, la cual permitirá que la alfombra tenga más consistencia, firmeza y sea más sólida.

Todo este proceso está mecanizado. El bulto, aún con todas las alfombras unidas, circula a través de un rodillo, donde se le aplica dicha capa de látex.

Una vez aplicada esta capa, el bulto sigue desplazándose por el recorrido, hasta que se seca completamente.

4. El tundido

El diccionario nos aporta la siguiente definición para el tundido, que nos da una buena idea de qué significa.

Tundir: cortar o igualar con tijera el pelo de los paños.

Fuente: R.A.E.

Parte del proceso de fabricación de la alfombra
Máquina que participa en cómo se hace una alfombra

En el caso específico de la alfombra, el proceso del tundido consiste en cortar con una cuchilla gigante todas las alfombras a la misma altura, con el fin de igualar todas las hebras de lana, y así conseguir que cualquier imperfección en la alfombra quede eliminada.

Cuando sacamos las alfombras del telar y posteriormente las repasamos a mano hay hilos de lana que se quedan con más altura, y no toda la alfombra queda uniforme.

Con la tundosa (nombre que recibe la máquina que se encarga de esto), obtenemos el resultado que queremos.

Os dejamos aquí unas imágenes y un vídeo, para que se entienda todo mucho mejor.



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